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La osteopatía craneal es la parte de la osteopatía que está enfocada al tratamiento de las patologías que, tras su diagnóstico osteopático, tienen su causa en la estructura ósea del cráneo y mandíbula (articulación témporomandibular), músculos que en ella se insertan, gran parte del sistema nervioso central y vegetativo que ella alberga y en la alteración del funcionamiento de todas estas estructuras.
Algunos de los signos y síntomas mas frecuentes que necesitan una exploración craneal son:
Podemos comparar el sistema nervioso central como el gran director de orquesta. Él solo dirige, controla y coordina al resto de nuestro cuerpo.
Es por ello por lo que el sistema nervioso central, y por ende el craneo, es un punto fundamental de revisión y tratamiento (en caso de ser necesario) para la mejoría de los pacientes, tanto por una afectación local que parta del cráneo, como para favorecer el funcionamiento de otra zona patológica a distancia.
El tratamiento comienza con la realización por parte del osteópata de un examen completo.
Primero se realiza la anamnesis (en la que el paciente explica lo que le sucede, signos, síntomas…), inspección, palpación de los tejidos y articulaciones, test de movilización activos y pasivos y neurológicos, revisión de exámenes radiológicos y pruebas de laboratorio que pueda aportar el paciente.
Este examen osteopático va a evidenciar todas las alteraciones mecánicas y, tras esta evaluación cuidadosa e indolora, el osteópata establecerá la cadena lesional del paciente elaborando su diagnóstico, para así aplicar una serie de técnicas adaptadas y elegidas cuidadosamente.
Centrándonos en las técnicas osteopáticas craneales hemos de decir que son manuales, suaves e indoloras. Se aplican sobre la cabeza del paciente pero de forma cuidadosa y con una presión leve que puede resultar incluso agradable. Dependiendo del fin se eligen las técnicas a aplicar, dentro de un amplio abanico, para cada tejido y plano que queramos equilibrar: tejido membranoso, de fluidos y óseo.
El objetivo de estas técnicas es devolver la maleabilidad de los huesos craneales y el equilibrio entre ellos. De esta forma, eliminamos dolores derivados de tensiones suturales, manteniendo también un correcto paso de fluidos y estructuras nerviosas en su recorrido por el cráneo y agujeros y conductos que en él se forman.
Por otro lado, son de revisión y valoración obligada las meninges. Éstas sirven de medio y guía de arterias, venas y nervios, así como revestimiento óseo y formación de senos venosos. Por todo esto, y por su propia inervación sensitiva, conforman una posible fuente del dolor que el paciente presenta.
Osteopatía craneal. Técnica indolora con grandes resultados
El ritmo de las sesiones de tratamiento varía de un caso a otro, de cada paciente y de la lesión. Habitualmente se requiere un tratamiento cada 10 – 15 días. Se irá espaciando después, salvo en los casos muy agudos en donde las sesiones pueden realizarse con mayor frecuencia.
